La creatividad nos permite nuevos puntos de vista, nuevas soluciones, nuevas ideas. Buscamos y valoramos lo nuevo porque lo conocido ya está integrado y no nos interesa.
Sin embargo, la creatividad no es algo que nos pertenezca y de lo que podamos disponer a placer ¡ójala! La creatividad requiere cuidados, paciencia, amabilidad con uno mismo y trabajo.
En este vídeo pongo un ejemplo real de hoy mismo en el que he ido a buscar activamente la creatividad porque he sido consciente de que en mi estado de nervios y enfado no tenía ninguna.
A través de este ejemplo tonto, quiero transmitirte la idea de la importancia del estado. Stephen Gilligan dedica su vida a enseñar que “seremos tan buenos haciendo algo como el estado en el que estemos”. Eso ya lo saben los artistas y los deportistas de élite, pero es un concepto que el resto de profesionales olvidamos a menudo. Los músicos afinan sus instrumentos, los atletas calientan pero nosotros nos lanzamos a nuestros trabajos sin darnos unos minutos para observarnos y para conectar.
¿Cómo vas a atender bien a tus clientes si estás nervioso, ansioso o enfadado?
En este vídeo de explico básicamente cómo puedes recuperar tu creatividad a través del estado.